El calentamiento y el estiramiento de los músculos es fundamental siempre que se vaya a practicar cualquier actividad física o deportiva. Sin embargo, todavía hay muchas personas, deportistas ocasionales en su mayoría, que no le dan la importancia suficiente a estos dos pasos cuando realizan ejercicio, ya sea por pereza o por falta de tiempo.
No hay que olvidar que calentar y estirar es una inversión en salud. ¿Por qué son tan importantes el calentamiento y el estiramiento y cómo hay que realizarlos para que sean eficaces?
El calentamiento está constituido por una serie de movimientos suaves que deben realizarse antes de cualquier deporte y ayudan a preparar y adaptar el cuerpo para una actividad física más intensa. El calentamiento hace que haya menos probabilidad de lesionarse durante el ejercicio ya que músculos, tendones y huesos se van adecuando de forma progresiva a la actividad posterior. Además, nuestro organismo alcanza su máximo potencial cuando está caliente, por lo que con un calentamiento adecuado, el cuerpo rinde mejor.
El calentamiento varía dependiendo de la actividad física, el nivel de ésta o la duración de la misma. Se puede dividir en calentamiento general y específico. En el primero se busca incrementar el flujo sanguíneo a los diferentes músculos y órganos y aumentar progresivamente las funciones del corazón y los pulmones. En el específico se realizan una serie de estiramientos leves dirigidos a los músculos que van a participar en el ejercicio con mayor intensidad. En líneas generales, el calentamiento y el estiramiento previo al ejercicio no deberían aumentar la frecuencia cardíaca más del 70% de nuestra frecuencia máxima.
Respecto a los estiramientos, no hay que dejarlos solo para el final del ejercicio. Los estiramientos previos tienen como principal fin preparar los músculos para el ejercicio y hacerlos más flexibles mientras que los posteriores a la actividad física buscan eliminar las tensiones que se producen durante el deporte, contribuir a la buena circulación y reducir el dolor muscular. Además, prepara el cuerpo para su fase de regeneración y equilibra las fibras. El riesgo de lesiones y sobrecargas disminuye considerablemente si se adopta la rutina de estirar.
Por otra parte, estirar hace que el ácido láctico responsable de las agujetas se reabsorba más rápidamente. Los especialistas recomiendan realizar cada ejercicio de estiramiento al menos entre 15 y 30 segundos y notar como el músculo tira, sin que aparezca nunca dolor durante por lo menos diez minutos. Los estiramientos son, además, un buen remedio contra los calambres.